La carismática y multifacética Emma Stone, estaría negociando su participación en el nuevo proyecto cinematográfico de Damien Chazelle, luego de haber trabajado juntos en “La La Land” (2016).
Este director saltó a la fama gracias a su ópera prima “Whiplash” (2014), pero alcanzó el esplendor de su corta carrera con la premiada “La La Land”, firme candidata al Óscar que finalmente le fue concedido a “Moonlight” en una confusión histórica dentro de la celebración de los premios de la Academia.
Chazelle fue bien acogido por las críticas en su última película “First Man” (2018), aquella que se encarga de retratar la vida del astronauta Neil Armstrong. La misma fue protagonizada por Ryan Gosling – quien volvió a colaborar con este director luego de su protagónico en La La Land- y Claire Foy.
“Babylon” es el nombre del proyecto en ciernes que cuenta con la posible participación de Emma Stone, cuyo compañero de elenco podría ser nada más y nada menos que Brad Pitt. Lo poco que se conoce acerca de la misma es que se encontraría ambientada en Hollywood alrededor de los años ’20, y contará la experiencia del traspaso del cine mudo al sonoro. Clara Bow (1905-1965) fue una de las estrellas más célebres de esta época y se especula que sería el personaje que Stone estaría destinada a interpretar.
Las productoras que ansían formar parte del proyecto serían Lionsgate, Paramount y Netflix. Se espera que Chazelle logre duplicar el éxito de La La Land, la cual cosechó más de 400 millones alrededor de todo el mundo.
Talento de sobra tiene este joven director, guionista y productor, que como dato de color es interesante saber que ganó un Óscar por su dirección de La La Land y logró así transformarse en la persona más joven de la historia en ser galardonado con este premio en esa categoría . Emma Stone no se quedó atrás del éxito, dado que gracias a su participación en la misma ganó su primer Óscar como mejor actriz protagónica.
La fórmula de Chazelle y Stone funciona con creces y esperamos que este proyecto finalmente pueda concretarse y no se disipe en la sombra de su magnífica antecesora. Sabemos que Hollywood tiende a replicar los formatos que resultaron exitosos pero no siempre se logran condensar en una película inolvidable.
La La Land fue grandiosa y elocuente. Chazelle pareciera moverse como pez en el agua a la hora de socavar al interior de los vaivenes del éxito y de la maquinaria hollywoodense. Por eso resulta inevitable comparar “Babylon” con “La La Land”, donde creyera nuevamente abordar algo de este tipo de argumentos.
Desde cinéfilos confiamos en las capacidades de estas jóvenes promesas del séptimo arte, y depositamos nuestras energías en pensar que la fórmula Chazelle-Stone dará nuevamente de qué hablar.