Al momento de elegir entre las distintas ofertas para mirar una ficción cómica, con la que intentamos sentarnos y relajarnos después de un largo día, nos cuesta mucho tomar una decisión. “¿Me recomendás una comedia para no pensar?”, suele ser el reclamo de algún amigo cansado de buscar en Netflix. Por eso, te traemos una solución para la próxima vez que tengas ese inconveniente.
Repasando la historia de la comedia norteamericana desde los 80 en adelante, se puede señalar a los hermanos David y Jerry Zucker, que hicieron escuela con ¿Y Dónde Está El Piloto?, Top Secret y La Pistola Desnuda; a los hermanos Bobby y Peter Farrelly, con Tonto y Retonto, Loco Por Mary, e Irene, Yo y Mi Otro Yo; a las producciones que nacieron de la mano de Scary Movie en el 2000 –donde también tuvo un rol clave David Zucker- pero que rápidamente copiaron la fórmula y la gastaron en un millón de películas similares, como No Es Otra Tonta Película Americana; o también apuntar al humor adolescente que se popularizó de la mano de la saga de American Pie.
En el medio, no se puede olvidar a Adam Sandler, que se formó en Saturday Night Live y supo cautivar a una horda de seguidores, aunque con el tiempo comenzó a recibir cierto rechazo de gente cansada de verlo hacer “siempre lo mismo”. Más allá del lado en el que uno se ponga con respecto a este actor, no se puede negar que él también hizo escuela, y uno de sus grandes alumnos fue Andy Samberg.
También salido de la cantera de SNL, Samberg parece haber descubierto la receta de la Coca Cola; con un humor similar en cada uno de sus personajes y el agregado sensacional de la música de ese proyecto llamado The Lonely Island, se encargó de recrearse en cada una de sus producciones respetando una estructura. Así, en 2013, Dan Goor y Michael Schur lo eligieron para protagonizar una de las mejores comedias que dio esta década: Brooklyn Nine-Nine y acá podés ver el tráiler.
Apoyándose, en la relación pseudo-paternal que su personaje, Jake Peralta, mantiene con el capitán de la comisaría de Brooklyn en la que trabaja, Ray Holt (Andre Braugher), Samberg logró deshacerse de ese manto de solemnidad que suelen tener los héroes ficticios. Claro que también fue crucial el aporte de un coro de actores increíbles, en su mayoría comediantes como Joe Lo Truglio y Chelsea Peretti, que se encargaron de sumar su cuota a la trama.
¿De qué va? La historia es simple, cada episodio se trata de la resolución de un caso criminal al mejor estilo La Ley y El Orden. Sin embargo, en esta ficción importa más el vínculo entre los distintos policías y la capacidad de romper los límites de lo absurdo para resolver un caso, que por lo general termina cerrándose en los últimos tres minutos de la serie sin profundizar demasiado en las explicaciones que, al fin de cuentas, no nos importan.
Recurriendo constantemente al uso del flashback y utilizando a un elenco de nueve personajes principales, cada uno con un rol crucial para el desenlace del capítulo, Brooklyn Nine-Nine se ganó a base de carcajadas un lugar en el corazón de los amantes de la comedia norteamericana. Además, como si con eso no fuera suficiente, la serie se encargó de tratar temas de actualidad, comprobando que uno se puede reír de la realidad, sin dejar de ser crítico con lo que pasa a su alrededor.
Si bien la serie fue cancelada por Fox en 2017, los fans lograron rescatarla haciendo campaña en las redes sociales, luego de que NBC se hiciera eco del pedido. Podés disfrutar las primeras cuatro temporadas en Netflix y esperar a que carguen la quinta, mientras desde la nueva señal se encargan de producir la próxima entrega.