Alfred Molina rompió en llanto al recordar cómo su padre desaprobó su carrera como actor, y el dolor de no sentirse comprendido.
El actor Alfred Molina, conocido por sus papeles en producciones como Spider-Man 2, Frida, y Boogie Nights, recientemente habló sobre su relación con su padre, quien nunca aprobó su elección profesional. Esta decisión lo afectó profundamente y dejó una marca emocional que aún carga consigo.
¿Qué dijo?
“Cuando era muy joven, mi papá me consiguió un trabajo como camarero en el restaurante donde trabajaba”, recordó Molina. “Si lo digo yo mismo, fui un buen camarero hasta el punto en que la gerencia me ofreció la oportunidad de hacer un curso de capacitación de dos semanas para gerentes”. El actor confesó que su padre, inmigrante español en Londres, veía el trabajo artístico como algo poco serio y desaprobó su decisión. “Él me miró y tenía la expresión en su rostro que reservas para los locos y los perdidos. Me miró como si no me reconociera. Lo único que pude decirle fue: ‘Esto es lo que amo, papá’”, comentó Molina entre lágrimas, recordando el momento en que rechazó un empleo estable para lanzarse al incierto mundo de la actuación.
A pesar del éxito que alcanzó en su carrera, su relación con su padre nunca mejoró. Incluso, Molina admitió que por años vivió con el peso de esa desaprobación y con el dolor de que su padre nunca presenció sus logros en persona. Sin embargo, al fallecer, Molina descubrió que él había guardado recortes de sus entrevistas y fotos. “Decepcioné a mi padre. Si mi padre hubiera vivido un poco más, con suerte se hubiera dado cuenta que no perdí el tiempo. Cuando el falleció, mi madrastra me entregó una maleta, y estaba llena de recortes, fotos cartas que le habían escrito diciendo “Acabado de ver a Alfredo ahí” y guardo todo esto pero nunca me lo dijo”, expresó el actor.
Molina nunca se quedó con la maleta, pese a que su madrastra se la ofreció. Años más tarde, luego de una vida de éxitos en el cine y de una gran huella en el corazón de los fanáticos de Spider-Man, Alfred reflexiona sobre la niñez y la paternidad: “Siempre lo he intentado con mis hijos. Todo lo que puedes hacer es decirles lo brillante que eres. Eso es todo lo que tienes que hacer”.