No veas Mare of Easttown, ya tenemos mucha angustia acumulada porque una pandemia nos viene cambiando la vida. No veas Mare of Easttown, no necesitamos que una serie de ficción nos haga pensar, remover y preguntarnos tantas cosas. Así que si es posible, no veas Mare of Easttown.
Pero si pese a todo ya viste o estás convencidx de ver la serie protagonizada por la muy maravillosa Kate Winslet y llegaste hasta acá buscando consuelo, tenes que saber que no estás solx y que esas lágrimas, las hemos derramado juntxs.
Mare of Easttown es una miniserie policial de siete episodios, emitida por HBO. Escrita por Brad Ingelsby y dirigida por Craig Zobel, sorprende, entre otras cosas, que sea un guion original y no una adaptación literaria: desde el primer episodio todo está tan bien narrado que pareciera ser un cuento largo o una novela, nos abre la puerta hacia un universo con personajes que pueden explorarse infinitamente y que extrañaremos cuando hayamos terminado la serie.
Desde su lanzamiento en abril de este año, se posicionó firme como una de las mejores series policiales en lo que va del 2021. Tiene sentido, de principio a fin, el caso que investiga Mare no se agota. El giro final es realmente inesperado, las complejidades de los personajes nos mantienen atrapados. Además están todos los condimentos necesarios para contar una buena historia: una protagonista errante, personajes entrañables, historias de horror y de amor en la misma medida, transformación de la protagonista, revelaciones, descubrimientos, tragedias.
Es válido preguntarse sobre qué va la serie y podría decirse que no es una sobre detectives, pero hay, efectivamente, detectives que deben resolver más de un caso policial. Tampoco es una serie sobre el duelo, pero Mare of Easttown está atravesada por pérdidas irreparables, que deben acomodarse en los corazones y las vidas de varios personajes, incluyendo a su protagonista. Y por último, no se puede decir que el tema de la serie es la maternidad, pero ese tipo de vínculo es central y es al fin, lo que motoriza la trama, la vuelve más compleja y conmovedora. Este punto es lo que lleva al espectador a un lugar más profundo que la búsqueda de la verdad sobre el asesinato en el pueblo.
La serie se despega de la clásica (y tal vez algo agotada) estructura de “pueblo chico, infierno grande”, sobre todo por estos vínculos que llevan los personajes femeninos. Encarnan distintas formas de ejercer la maternidad, en donde se despliega lo fuerte de la historia.
Mare vive con su madre (Jane Smart) y con su hija (Angourie Rice). Es además la abuela del pequeño Drew, el hijo de su difunto hijo Kevin. A medida que pasen los episodios nos daremos cuenta de que en todos estos vínculos de madre-hijxs habrá cosas que resolver, cosas que perdonar (y perdonarse) para poder seguir adelante.
Personajes
Hay otros personajes que abordan la maternidad desde diferentes puntos de vista. La madre de Drew que peleará por la custodia del niño, Lori (Julianne Nicholson), la mejor amiga de Mare que deberá enfrentarse a situaciones límite con su familia y poner en juego su rol, otra madre del pueblo buscará incansablemente a su hija perdida y hará las veces de madre de su nieta. La víctima del homicidio habrá sido, antes, la madre de un niño que quedará a cargo de otras madres sustitutas. La lista sigue, porque es un tema central y porque la tragedia está contada desde ahí. Parece que en siete episodios se pudiera resumir la vida entera de una familia o de un pueblo, que en este caso se mezclan: pueblo y familia podrían ser una misma cosa.
Dicho por el propio Ingelsby, en la serie hay una clara intención de “poner las cosas de nuevo en su lugar” que se deja entrever, también, en todos los vínculos de todas estas madres con todos esos hijos. A pesar de que el guionista dejó en claro que Mare of Easttwon fue pensada para tener una única temporada, pareciera que habrá más, que ese es un entramado complejo, que no se agota y que podríamos ver en temporadas siguiente. Cómo van evolucionando estos nuevos vínculos de madres e hijos atravesados por las pérdidas.
Además, como si fuera poco, la figura de Mare (Kate Winslet) nos tranquiliza, hay cierto “destierro” de la idea de que ser joven, flaca y hermosa es el único camino para vivir la femineidad o para, por ejemplo, ser seductora y seducida. En la serie no es lo más importante, pero Mare vive dos historias de amor. En el contexto de esta trama no es poco, porque es una detective detrás de un caso terrible que involucra a sus seres queridos y es a la vez una madre duelando a un hijo y es, también, una mujer aceptando que su ex marido está comprometido con una nueva pareja. Nada indicaría que es un personaje que vaya a vivir historias de amor, pero así es. Tal vez nos regalan esa cuota de luz para no dejarnos tan solos en la tragedia y podamos, entonces, salir menos golpeados.