El último trabajo de David Rodríguez irrumpe con frescura en la sección “zinemira” y sorprende por su buen hacer en el apartado de dirección.
Una de las secciones que más nos atrae del Festival de Cine de San Sebastián es la de “Zinemira” dedicada a mostrar piezas con un marcado interés cinematográfico y que en muchos aspectos destacan por sus singularidades. Lady Off es una de esas películas que sobresalen por encima del resto por su: sencillez, frescura y ritmo.
David Rodríguez acierta con la intensidad de su narrativa cinematográfica sumiendo al espectador en una trama muy bien estudiada. Los movimientos de cámara y su cercanía en algunos planos nos hacen sentirnos, por momentos, un personaje más de la cinta. Este es uno de los aspectos que más nos ha gustado del film, la inteligencia con la que afronta cada plano es simplemente magistral.
Otro de los aspectos que nos ha llamado la atención, es la verdad con la que afronta el papel de la mujer en algunas de las obras de la literatura clásica. Condenadas a ser bastones de tramas más importantes que la propia. Quizás, y esto es opinión de un servidor, esta obra pueda tener su reflejo en nuestra sociedad.
Como conclusión, Lady Off es una obra humilde pero hecha con mucho trabajo y esfuerzo y se nota en cada plano. Y después de haber visionado la mayoría de las películas que compiten en su categoría podemos asegurar que es una de nuestras favoritas. La recomendamos encarecidamente siempre que se esté buscando algo que sorprenda.
Estamos ante uno de los directores más prometedores del panorama nacional, (¡si he dicho nacional!). Y estoy seguro que sus próximos largometrajes serán un referente para futuras generaciones. Tan solo nos queda felicitar al Festival de Cine de San Sebastián por tener la valentía y el arrojo de apostar por cine de calidad y diferente.