Luego de 20 años, el actor Denzel Washington volvió a la alfombra roja del Festival Internacional de Cannes.
El Festival Internacional de Cannes está dando que hablar en su edición 78. Es que, con la presencia de una producción basada en una novela argentina, y Franco Colapinto, el país se paralizó. Pero no solo sucedió eso, también hubo una gran apertura por parte de Quentin Tarantino, y se le entregó la Palma honorífica a Robert De Niro que lanzó un poderoso discurso. Y como no podía no suceder nada más, Denzel Washington también dio la nota.
Como De Niro, Denzel recibió de manera sorpresiva la Palma honorífica, por su extensa trayectoria dentro del mundo del séptimo arte. El actor se encuentra en la ciudad francesa por Highest 2 Lowest, su nueva colaboración con el director Spike Lee, una adaptación del clásico High and Low de Akira Kurosawa presentada fuera de competición. Cruzó la alfombra roja con el resto del equipo del filme, en el que también sobresalen figuras como Jeffrey Wright, Ilfenesh Hadera, Elijah Wright o el rapero A$AP Rocky y allí fue cuando hubo un tenso momento.
¿Qué sucedió?
Hacía más de 20 años que Washington no se presentaba en el Festival Internacional de Cine de Cannes, siendo la última vez en 1993 por el estreno de Mucho ruido y pocas nueces.
Las imágenes difundidas en redes sociales retrataron a Denzel señalando con el dedo en alto y gritando, visiblemente enojado. Según reveló el experto en lectura de labios Jeremy Freeman en declaraciones exclusivas al Daily Mail (20 de mayo de 2025), lo que Washington expresó al fotógrafo fue: “¡Oye, una vez más — detente! Déjame decirte — basta, basta — nunca me vuelvas a poner las manos encima”.

Durante todo el intercambio, el hombre de prensa sostuvo una sonrisa en la cara a pesar del enfado del actor. Freeman añadió que el fotógrafo dijo algo como: “No está permitido”, luego se rió y dijo sarcásticamente: “Sí, sí, sí”.
No obstante, el hombre volvió a tirar del brazo del actor una vez más para pedirle una foto. A este punto, Washington gritó: “¡Basta! ¡Basta! ¡En serio, basta!”, por la invasión de su espacio personal.
El discurso tras la Palma
“Tenemos algo especial que darle, señor Denzel Washington”. dijo en tono misterioso Spike Lee al micrófono, mientras el delegado artístico del festival Thierry Frémaux, se acercaba con una caja, acompañado de la presidenta del certamen, Iris Knobloch.
“Es la Palma de Oro de honor para él”, anuncio Frémaux, desatando un gran aplauso y ovaciones del público.
Muy emocionado, el actor pidió a la audiencia que se sentara para poder hablar, reconociendo que el homenaje le había pillado por sorpresa. “Desde el fondo de mi corazón, gracias a todos (…) Somos un grupo muy privilegiado los de esta habitación porque podemos hacer películas y llevar esmóquines y ropas bonitas y nos pagan por ello. Nos sentimos bendecidos sin medida, me siento bendecido sin medida”.



