La gestión de Carlos Pirovano no se destaca por algo positivo, sino que impactó de manera negativa en el INCAA.
Sin dudas, el cine argentino atraviesa uno de sus peores momentos en la historia. Según destacó el Espacio Nacional Audiovisual (ENA), bajo el mandato de Carlos Pirovano, en el 2024 el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) no llevó a cabo producciones nacionales.
“A lo largo del 2024 y en lo que va del 2025, Pirovano se ha convertido en el único presidente del INCAA en tener el récord histórico de CERO PELÍCULAS ARGENTINAS aprobadas durante su gestión”, señala el comunicado firmado por entidades como DAC, ARGENTORES, APIMA, PCI y CADICINE.
La misma denuncia que ese dato no es fruto de una omisión administrativa, sino de un diseño deliberado: la eliminación de líneas de fomento, el cierre de la ventanilla continua, la aplicación del decreto 662/2024, la supresión de la cuota de pantalla nacional y el vaciamiento de espacios como el Cine Gaumont.

La participación del cine argentino en la taquilla se desplomó del 10% al 2%, dejando a cientos de producciones en stand by y afectando de manera directa a más de 600 mil trabajadores entre técnicos, guionistas, productores, actores, vestuaristas, fotógrafos y personal logístico.
La línea del gobierno es desmantelar todas las áreas que no generen rentabilidad por si mismas, y el cine argentino cayó en este plan de ajuste.