El prestigioso festival, que tendrá lugar del próximo 14 al 25 de mayo, homenajea a la cineasta Agnès Varda, fallecida recientemente, brindándole el protagonismo en el póster oficial con una conmovedora imagen y el siguiente texto.
Agnès, a la luz del sol brillante.
“Todo el camino.
Tan alto como ella podía ir.
Encaramada en los hombros de un técnico impasible.
Aferrada a una cámara, que parece absorberla por completo.
Una joven de 26 años que realiza su primera película.”
Con este texto comienza el primer comunicado oficial del 72 Festival de Cannes, al que acompañaron con el nuevo póster que rinde homenaje a la gran cineasta.
Es agosto de 1954: estamos en el barrio de Pointe Courte de Sète, en el sur de Francia. En la deslumbrante luz de verano, Silvia Monfort y Philippe Noiret exploran su frágil amor, rodeados de pescadores que luchan, mujeres bulliciosas, niños jugando y gatos vagabundos. Agnès Varda, la fotógrafa del Théâtre National Populaire de Jean Vilar, está preparando el camino para un joven. Con ajustes naturales, una cámara de poco peso y un presupuesto muy reducido: con La Pointe Courte (presentada en Cannes, en una proyección en la rue d’Antibes, en 1955). El cine, del que seguirá siendo la única directora femenina.
Como un manifiesto, esta foto fija del conjunto resume todo acerca de Agnès Varda: su pasión, su aplomo y su malicia. Ingredientes de un artista libre, formando una receta que nunca dejó de mejorar. Sus 65 años de creatividad y experimentación casi coinciden con la época del Festival de Cannes, que celebra cada año visiones que revelan, se atreven y se elevan. Y a quien le sigue gustando recordar.
Como a ella le gustaba señalar, Agnès Varda no es una mujer cineasta: Agnès Varda es una cineasta. A menudo asistió al Festival de Cannes para presentar sus películas: 13 veces en la Selección Oficial. También fue miembro del Jurado en 2005, así como Presidenta de la Caméra d’or Jury en 2013. Cuando recibió la Palma de Honor Honoraria en 2015, evocó “resistencia y resistencia, más que honor”, y la dedicó “Para todos los cineastas valientes e inventivos, aquellos que crean cine original, ya sea ficción o documental, que no están en el centro de atención, pero que continúan”.
Vanguardista pero popular, íntimo y universal, sus películas han liderado el camino. Y así, encaramado en lo alto de esta pirámide, observando la playa de Cannes, joven y eterna, Agnès Varda será la fuente de inspiración de esta 72ª edición del Festival.