Ayer a la noche se presentaron los premios Gotham, los cuales reconocen al cine independiente año tras año.
Esta entrega fue protagonizada por nominados como “The Favourite” de Yorgos Lanthimos, “First Reformed” de Paul Schrader, “If Beale Street Could Talk” de Barry Jenkins y “Eight Grade”, la ópera prima de Bo Burnham, entre otras.
En la categoría de mejor película, el premio fue para “The Rider” de Chloé Zhao la cual competía contra grandes nombres como “The Favourite”, “First Reformed”, “Madeline’s Madeline” e “If Beale Street Could Talk”. Sin embargo el premio del público se lo llevo “Won´t You Be My Neighbor?” el documental dirigido por Morgan Neville, el cual examina la vida y obra del presentador Fred Rogers. En la categoría general de mejor documental, se eligió premiar a “Hale Country This Morning, This Evening” de RaMell Ross.
Por su parte, el comediante Bo Burnham se llevo el premio de director revelación por su primera película “Eight Grade”, la cual también le dio su merecido reconocimiento a su actriz protagónica Elsie Fisher, quien fue elegida como actriz revelación por su trabajo en la misma.
El premio de mejor actriz se lo ganó Toni Collette por su interpretación en “Hereditary” la película de terror dirigida por Ari Aster. El elenco de “The Favourite”, conformado por Rachel Weisz, Emma Stone y Olivia Colman se llevó el premio a mejor ensamble. Weisz aprovechó la conferencia de prensa luego de la premiación para expresar sus sentimientos hacia una temática específica: “Espero que algún día en un futuro no tan lejano, ya no nos pregunten qué se siente trabajar con otras mujeres porque realmente no creo que le hagan esa misma pregunta a los hombres. Igual quien sabe capaz me equivoque.”
Otra gran ganadora de la noche fue la película de Paul Schrader, “First Reformed”, protagonizada por Ethan Hawke, la cual fue premiada por su guión y la gran actuación de Hawke. El actor aprovechó su discurso para hacer referencia a los momentos difíciles de la actualidad y destacar el poder del arte sobre ellos:
“Vivimos en un momento, en un periodo de tiempo, que hay un vacío de liderazgo, tanto político como espiritual. En este periodo de tiempo, mucha responsabilidad recae en las artes. Nosotros, la comunidad artística, la gente en esta sala y allá afuera, podemos trascender las mentes y abrir los corazones que normalmente se encuentran cerrados. No debemos recaer en el pensamiento trivial. Como miembros de la comunidad artística, somos los grandes generadores de la empatía y la compasión y debemos hacer nuestro trabajo. Estamos viviendo un momento donde el medio ambiente, la educación y la igualdad de razas están siendo gravemente ignorados. Es inaceptable. Mi madre siempre me dijo que no tenes que proteger la verdad sino que tenes que vivirla y ella misma te protegerá.”