La actriz protagoniza Estafadoras de Wall Street, la nueva película de Diamond Films y en la siguiente entrevista cuenta cómo preparó el personaje, que se viene posicionando ante la prensa mundial como el mejor trabajo de su carrera actoral.
Jennifer López interpreta a Ramona, la principal fuente de ingresos de un club de striptease de Nueva York que, después de la caída de la bolsa de valores en 2008 y en medio de una gran recesión, idea un plan audaz e ilegal con un equipo de colegas strippers para desplumar a los clientes masculinos.
La película está inspirada en una historia real, y en la entrevista López habla de los seis meses de entrenamiento de pole dance que soportó para prepararse físicamente para el exigente papel, y sobre el día en que Usher, Cardi B y Lizzo se presentaron en el set.
P: ¿Crees que este papel es completamente diferente a lo que habías hecho anteriormente y otro punto de inflexión en tu carrera?
R: Sí, creo que sí. La gente siempre tiende a dar por perdidas a mujeres de cierta edad, pero siento que mis mejores años están por venir y cuanto más aprendo y más vivencio, y cuanto más abierta estoy a crecer, el resultado de mi trabajo es aún mejor. Siento que incluso como cantante, como intérprete, como actriz, como productora, puedo aportar algo nuevo y mejor cada día. Es maravilloso encontrarme en este punto de mi vida y de mi carrera y poder decir esto.
P: ¿Fue un poco desmoralizante interpretar a este personaje teniendo en cuenta el pole dance y la naturaleza sexual del papel?
R: Sí. Al principio no pensé que lo fuera. Cuando comencé a bailar en el caño y descubrí lo difícil que era, y luego subí al escenario aquél día para bailar, y el club estaba lleno de 300 extras, gritando y silbando, y tenía que subir allí con lo que tenía puesto, y pensé: “Dios mío, esto es una locura. ¿Qué estoy haciendo con mi vida en este momento?” (Risas) Pero, como actriz era sumamente estimulante pensar en interpretar a un personaje como Ramona, que tenía muchos matices, ya que era firme, feroz, ambiciosa y fuerte y, al mismo tiempo, era amorosa y cariñosa.
P: ¿Como tú?
R: En cierto modo, pero nunca pude verme haciendo las cosas que ella hizo. Así que había un nivel extra en el modo en que ella vivía su vida sin complejos. Ella entendía que el juego se juega de cierto modo, y que si no vas a jugarlo, entonces se aprovecharán de ti. Ese era un punto de vista un poco más duro, tal vez, que el mío.
P: Tienes mucha química con Constance Wu en la pantalla. Se ve muy natural.
R: Creo que desde el principio supe cómo debía ser nuestra relación. Siempre que trabajo con alguien, especialmente con mujeres, me gusta asegurarme de que todos se sientan cómodos, especialmente cuando estoy produciendo. Quiero que sepan que nuestros sets son cómodos, que te vas a sentir bien, que será un espacio creativo enriquecedor. La química que teníamos era real y se convirtió en este tipo de relación hermosa en la pantalla entre nosotras dos.
P: Hay otros nombres grandes en la película, como Cardi B, Usher y Lizzo. ¿Es cierto que todos llegaron al set el mismo día?
R: Sí. Fue muy divertido. Se sintió exactamente como lo escribió Lorene (directora / guionista Lorene Scafaria) en el guion. “Este es el último día más increíble. Recuerdo cuando Usher entró al club, y todas las chicas estaban allí, y todos ganaban dinero, y todo iba bien”. Antes del colapso del mercado de valores. Fue una de esas noches perfectas en la que todos se están enriqueciendo, y tu cantante favorito entra, y están tocando su canción, y todas tus chicas están allí.
P: Si bien te conocemos como bailarina, por supuesto, nunca te hemos visto bailando pole dance. ¿Fue difícil?
R: Sí, absolutamente. Es acrobático. Es atlético. Yo soy atlética. Entreno, levanto pesas, bailo y hago todas las cosas de este estilo, y he hecho muchos deportes y disciplinas diferentes. Sin embargo, jamás había hecho un trabajo aeróbico como ese. Requiere un tipo de fuerza diferente. La coreógrafa Johanna Sapakie dijo: “Creo que puedes hacer esto”, y se pone boca abajo, con las piernas abiertas. Le dije: “No sé si soy tan flexible”. Ella me dijo: “Cuélgate boca abajo”. Y mientras yo dudaba, ella dijo: “No, tú puedes”. Johanna estuvo asombrosa. Trabajó en Cirque du Soleil durante años, es una profesional y trabaja en Las Vegas, por lo que también conoce los clubes de striptease. Tenía una gran capacitación técnica, y además conocía lo que sucede y cómo se mueven y todo. Así que en verdad pudimos jugar. Le dije: “Quiero hacerlo, tan maravillosamente como lo haces tú, pero también quiero parecer una stripper”, y ella me respondió: “Oh no, llegaremos allí. Primero, tienes que aprender la técnica, para que puedas hacer los movimientos”.
P: ¿Cuánto tiempo te llevó aprender el pole dance para la película?
R: Alrededor de dos meses. Es curioso, la primera vez que hablé con Cardi sobre hacer la película, le dije, “Acabo de empezar a aprender pole dance, y es muy difícil”. Y me dijo, “Me llevó años. Bailo divinamente, pero me llevó años aprender”. Yo pensaba, ‘Oh, Dios, tengo sólo siete semanas para aprender’. Consideré incluirlo en mi tour, pero pensé, ‘Es muy difícil’. (se ríe)
P: Hay una línea que dices, ‘La maternidad es una enfermedad mental’. ¿Te resultó difícil decirla?
R: No, creo que es la forma en que Ramona hablaría. Cuando conoces a Ramona, sabes que, para mí, es una de las líneas más importantes de la película. Ella adora profundamente el personaje de Constance Wu. Ella entiende por qué al final las entregará y literalmente las delatará por su hija. Ella entiende eso y dice: “La maternidad es una enfermedad mental”.
P: También te desempeñas como productora de la película. ¿Qué te atrajo de la historia que te hizo querer luchar para que se contara?
R: Me gustó el guion desde el momento en que lo leí. Olvidemos la historia y el guion por un minuto. Solo la idea. Elaine Goldsmith-Thomas y yo produjimos esto con Jessica Elbaum y Lorene. Se trata de productoras mujeres. Hay una directora, una escritora, mujeres protagonistas, una editora. Era algo que iba a ser increíble. Iba a ser una gran cosa y esta es una película real y cruda. No es una película tierna. Se torna oscura. Hay grandes personajes. Está bien contada. Es hermosa. Sabía que en ese sentido iba a ser algo especial. También era algo sumamente bueno para mí para asumir porque ahora, cuando te vuelves egoísta y dejas toso eso de lado, piensas, ‘Veamos, ¿es un buen papel para mí?’ Era un gran papel para mí.
P: Desde una perspectiva de marketing en este momento, ¿crees que es importante que haya más mujeres latinas liderando grandes películas que andarán bien?
R: Oh sí. Siempre hemos estado tratando de ir más allá. He hecho comedias románticas desde que tenía 20 años. Espero que eso cambie y movamos un poco la aguja porque un cierto tipo de actrices tradicionalmente desempeña esos papeles, ¿verdad? Queremos seguir avanzando hacia las cosas basadas en la realidad en lugar de aquellas que te hacen creer. Creo estamos en ese camino. Creo que estamos ahí. Creo que también es un buen momento para las mujeres. Estamos madurando y perdiendo el miedo a decir lo que pensamos y defendemos. Es un buen momento.
P: ¿Has percibido ese vuelco en los últimos años?
R: Siento que hace un tiempo que viene sucediendo. Pero de nuevo, es como, ‘¿Cuándo llegamos allí? ¿Alguna vez será suficiente? ¿Cuánto tiempo llevará hasta que sea realmente, verdaderamente equitativo?’ No lo sé. Todo necesita seguir avanzando en esa dirección. Seguir forzando la cuestión.
P: ¿Trataste de conocer a la verdadera Ramona?
R: Sí, yo quería, pero creo que todas pensaron que era mejor que nosotras no lo hiciéramos. Siempre me encanta interpretar a una persona real. Cuando lo hice con Selena y con Puchi, lo que más me gustó fue meterme en la cabeza y ver cómo se movían y escuchar cómo hablaban. Pero con este tuve que ser un poco más creativa.