Evil dead, la película que lanzó a la fama al director Sam Raimi, se convirtió a inicios de los años 80 en una de las grandes películas de culto del cine estadounidense de aquella época. Su estética sucia, su escaso presupuesto y sus chorros de sangre a borbotones la hicieron merecedora de dos secuelas que acabaron convirtiendo a su protagonista Ash (Bruce Campbell) en el protagonista de una trilogía con una innumerable legión de fans alrededor del mundo.
Ya en esta década del siglo XXI, y con la nostalgia ochentera en ciernes, a alguien le pareció una buena idea rodar un remake del primer film original. Y a ello se dedicó el uruguayo Fede Álvarez durante el 2013, que tras los dos exitosos cortometrajes que dirigió en su país, nos legó una más que digna versión del film de Raimi.
El buen sabor de boca del remake y la buena acogida de público, empujó a la compañía Starz a idear una serie de TV basado en el personaje principal de Ash, que volvería a ser interpretado por su actor original, y su lucha constante contra el mal.
Tras una primera temporada con una buena acogida de público, no han ido excesivamente bien las cosas desde entonces. Ya durante la emisión de la segunda temporada, el público que miraba la caja tonta dió las primeras señales de cansancio.
Ahora Starz ha anunciado la cancelación definitiva de la serie tras la emisión de su tercera temporada, que apenas ha obtenido una media de 136.000 personas por episodio. Bruce Campbell deja de esta manera para siempre, a su personaje más icónico.