Tras ocho años alejado del mundo del séptimo arte, Daniel Day-Lewis regresó con Anemone, una película dirigida por su hijo Ronan.
Ocho años después de su última aparición en la gran pantalla, Daniel Day-Lewis regresa al cine con un proyecto profundamente personal: Anemone, un drama dirigido por su hijo Ronan Day-Lewis.
La cinta, que se estrenará el 14 de octubre en el Festival de Cine de Londres BFI y llegará a los cines el 7 de noviembre, marca no solo el regreso de uno de los actores más influyentes de su generación y ganador de tres premios Oscar a mejor actor, sino también el inicio de una colaboración creativa inédita entre padre e hijo. Pero, ¿cómo fue recibida por la crítica?

En Rotten Tomatoes posee un 63% de aprobación
El puntaje recibido en la página es bajo teniendo en cuenta el calibre del actor. Desde Cinéfilos recabamos todo tipo de reseñas. Entre las positivas, Damon Wise de Deadline la describió como “una inquietante experiencia visual que muy a menudo supera lo que realmente se dice”. David Fear de Rolling Stone resaltó que “la interpretación del ganador del Oscar como un recluso que se enfrenta a su traumático pasado te recuerda por qué es una leyenda. Sin embargo, este drama familiar es cualquier cosa menos un mero escaparate”. Ryan Lattanzio de IndieWire subrayó que “esta historia oscura, densa y profunda sobre los Problemas en Irlanda resulta ser bastante mejor de lo que cabría esperar de esa noción”. Robbie Collin de Telegraph aseguró que “Daniel Day-Lewis es una maravilla en su regreso a la pantalla”. Y Jake Kring-Schreifels de The Film Stage consideró que “‘Anemone’ supone un debut arrollador y un regreso fascinante para Daniel Day-Lewis”.
Por su parte, algunas críticas se mostraron más intermedias. David Rooney de The Hollywood Reporter apuntó que “la robusta interpretación de Day-Lewis proporciona una apariencia de peso narrativo en un drama que, por lo demás, carece de él”. Jesse Hassenger de Paste Magazine remarcó que “Daniel Day-Lewis y su hijo Ronan aportan mucha integridad artística a la película, pero también hay cierto grado de autoindulgencia”. Mientras que Anzhe Zhang de Slant señaló que “no logra contar una historia familiar que esté a la altura de su esplendor visual y de su atmósfera enigmática”.
En contraste, otras reseñas fueron directamente negativas. Owen Gleiberman de Variety sostuvo que “Daniel Day-Lewis regresa a la gran pantalla en una desangelada pieza de inercia artística dirigida por su hijo”. Adrian Horton de The Guardian la definió como “un fracaso sombrío y dolorosamente serio”. Mick LaSalle de San Francisco Chronicle fue aún más tajante al afirmar que “Daniel Day-Lewis ha salido de su retiro para hacer algo que nunca había hecho antes: hacer una película verdaderamente horrible”. Robert Daniels de Screendaily opinó que “incluso para un hombre que podría considerarse el mejor actor de su generación, el obtuso guion y el abstracto lenguaje visual son demasiado para superar en lo que, en última instancia, es una película aburrida y serpenteante”. Y Bilge Ebiri de Vulture advirtió que “el verdadero problema es que necesitaba ser concisa y afilada como un diamante, en lugar de extensa y sin energía”.




¿De qué va?
“Anemone” explora las complejidades familiares a través de la historia de Ray Stoker, interpretado por Day-Lewis, un ermitaño que vive aislado en el bosque y cuya vida cambia con la llegada de su hermano Jem (Sean Bean), la expareja de Ray, Nessa (Samantha Morton), y Brian (Sam Bottomley), el hijo que nunca conoció.
A su vez, el actor de 68 años dialogó con Empire, de su “retiro”: “Nunca sentí que me hubiera retirado. Esa es una palabra que se ha usado. Simplemente dejé de hacer este trabajo porque quería dedicarme a otra cosa por un tiempo”.
Durante ese periodo, el actor estudió luthería (arte de construir y reparar instrumentos de cuerda) en Boston, mientras Ronan finalizaba su tesis universitaria y trabajaba como pintor en Brooklyn.