Durante el último fin de semana se presentó el nuevo proyecto de Francis Ford Coppola que tiene a Adam Driver como gran protagonista.
Parece que Francis Ford Coppola tendrá una nueva película a la altura de El Padrino. Es que el pasado 28 de marzo en Universal City Walk de Los Ángeles presentó Megalópolis, una producción que retrasó durante más de 40 años por un tema de presupuesto. Se estima que más de 350 espectadores estuvieron en la sala que ovacionó de pie al elenco, encabezado por Adam Driver, y el cineasta se emocionó hasta las lágrimas.
Coppola fue rechazado por todas las productoras que tienen peso en el mundo del séptimo arte, pero invirtió de su propio bolsillo la suma de 120 millones de dólares. “La película se sitúa en una Nueva York destruida por completo a causa de una catástrofe. César (Driver), es un arquitecto visionario que ve en la situación la oportunidad de transformar la ciudad, inspirándose en las utopías futuristas y el uso de materiales renovables. Sin embargo, esta visión idealista contrasta con la del alcalde Frank Cicero (Giancarlo Esposito), quien planea restablecer los edificios a base de hormigón y el mismo sistema de corrupción de antaño. En medio de la lucha, Julia (Nathalie Emmanuel), la hija socialité del alcalde, es la pieza central del conflicto moral, al verse atrapada entre la lealtad a su padre y reciente amor por César”, indica la trama.
El resto del elenco y las primeras impresiones
Jon Voight, Laurence Fishburne, Aubrey Plaza, Shia LaBeouf, Jason Schwartzman, Dustin Hoffman, Talia Shire, Grace VanderWaal, D. B. Sweeney, Isabelle Kusman, James Remar, Madeleine Gardella, Bailes Ives y Kathryn Hunter completan el elenco estelar que en otro momento había tenido nombres como Al Pacino y Nicolas Cage.
Las primeras impresiones de la prensa destacan lo “arriesgado”, “memorable” y “experimental” del proyecto. Deadline e Inverse mencionaron que la cinta no tenía pretensiones de contentar a la taquilla, y es justamente ese carácter “independiente” lo que la hace una epopeya tan rara como apasionante, convirtiéndola en el proyecto más personal de Coppola.
Se espera que, antes de su proyección en cines, el film sea uno de los más importantes del Festival de Cannes de 2024. Una de las curiosidades del rodaje fue que Jack Black lo visitaba solo porque quería ver como se manejaba Coppola.