Tras su paso por el Festival de Cannes, Titane se convirtió en una de las favoritas del año. ¡Te contamos de qué se trata!
Titane, la nueva película de la francesa Julia Ducournau (Raw), se presentó en el Festival de Cannes el pasado julio, donde se consagró con la Palma de Oro, el premio más importante del festival. En la nueva edición del Festival de Cine de Mar del Plata, la película se proyectó en varias funciones y generó opiniones desencontradas. El film está protagonizado por Agathe Rouselle y las participaciones de Vincent Lindon, Garance Marillier, Myriem Akeddiou, Dominique Front, entre otros.
¿De qué va?
Alexia (Rousselle) es una joven muy particular que, cuando era chica, tuvo un accidente en un auto que le dejó una marca de por vida. Una noche, tras una serie de crímenes realizados, Alexia decide convertirse en Adrien Legrand, un niño que desapareció hace una década, para protegerse. El padre de Adrien, Vincent, lo regresa a casa y esto supone el final de una larga pesadilla. Mientras Vincent trata de acercarse a quien cree que es su hijo, Alexia esconde varios secretos oscuros.
La película contiene varias historias dentro de una: por un lado, comienza con el accidente de Alexia para pasar a la vida adulta que lleva y, luego, la historia vira hacia una serie de asesinatos y huída de ella para comenzar con la segunda parte que contiene el drama familiar con el personaje de Vincent. Al mismo tiempo, se desarrolla otra historia que se vincula con la relación que tiene Alexia con los autos que comienza con el inicio de la película y termina con el final.
Es difícil categorizar una película de este estilo: el drama y el gore -género que incluye escenas con violencia explícita y sangre- se funden en uno y cada género tiene su tiempo de desarrollo. No necesariamente sucede uno con el otro sino que la película le da su tiempo a cada uno. De esta forma, se puede dividir en dos la historia de la película.
Titane es una película con una historia controversial, con imágenes impactantes; no es un film “para todo el mundo” y genera cierto “shock” con el pasar de las escenas. Es compleja y abre un abanico de posibilidades en su interpretación. Por eso, se dice que Julia Ducournau ha logrado una de las películas más interesantes del año.