¡Menos mal!
Todos pensamos que Bryan Cranston había sido la primera opción para interpretar a Walter White, pero no. Matthew Broderick fue la primera consideración de Vince Gilligan y lo rechazó.
Gilligan quería un actor cuyos rasgos físicos fueran 100% los de un hombre de familia, asentado, bueno y de gestos amables. Por ese motivo, en primera instancia decidió contratar a Broderick.
Sin embargo, el actor no se sentía muy cómodo con la manera en la que la televisión norteamericana estaba evolucionando y decidió quedarse en la pantalla grande.
¿Fue una buena decisión? Claro que sí. Cranston logró interpretar al mejor Walter White que los cinéfilos podamos conocer.