Matt Groening lanzó su primera producción junto a Netflix, que para muchos fue un “Desencanto”.
Del mismo creador de Los Simpsons y Futurama, llegó esta nueva animación original de Netflix situada en la época medieval. Disenchantment nos cuenta la historia que tiene como protagonista a una princesa, un demonio y un elfo. El elenco esta formado por las voces de Abbie Jacobson (Hack Into Broad City ) como la Princesa Bean, Eric André (Man Seeking Woman) como Luci, el demonio, y Nat Faxon (ganador de un Oscar por The Descendants en su rol de escritor) como Elfo. A continuación los “sí” y los “no” de esta primera parte de lo nuevo de Matt.
Una historia con carencia de originalidad llegó para “Desencantar” a la gran mayoría de su público. Con animaciones similares a las de Futurama, o Los Simpsons, siendo una mezcla de ambos, nos situamos en una época medieval. El desarrollo de los personajes es escueto, y sus relaciones interpersonales son burdas, y aquí también encontramos similitud con la serie futurista. Bean, la chica ruda como Leela; Elfo, un personaje inocente enamorado de la chica que parece no estar interesado en él; y vemos un demonio, Luci, que forma un personaje grotesco que representa la mala influencia como lo hace Bender. Esto sin hablar de los enormes parecidos no solo físicos, sino también psicológicos, que vemos entre otros personajes como Queen Dagmar y Pendergast (Disenchantment) con Mama y Zapp Branigan (Futurama).
Lo que se rescata de los personajes, es la originalidad de los tres personajes principales a la hora de salir de los estereotipos. Una princesa que sea rebelde y con una mala relación con su padre no es raro verlo, pero agregarle el condicionamiento que sea alcohólica le da un toque diferente; un Elfo que no solo no es feliz, sino que odia la alegría y disfruta del sufrimiento también tienta contra lo clásico; y por último un demonio, que si bien no pierde su maldad natural, aparece como una criatura pequeña y hasta adorable.
Por otro lado, la historia recurre a un humor muy básico y predecible. Solo faltaría que indiquen con un cartel “el chiste es este” por si hay algún despistado. Realiza críticas sociales que tanto le gusta marcar a Groening, pero que no contrastan con la sociedad como si lo logra con una animación como Los Simpsons. Además, intenta llevar una historia con un hilo conector, ningún capítulo es independiente del otro, pero la relación entre ellos tampoco es clara. Solo una parece ser la historia principal, que es la búsqueda de la vida eterna por parte del Rey Song. Un hilo conector que hace que capítulo tras capitulo surjan nuevos conflictos, pero un hilo que se desmorona sobre el final con dos giros inesperados. Si, a falta de uno, hay dos giros que cambian la historia en su totalidad en un desesperado intento de atrapar al público para una segunda temporada.
Sin dudas, “Disenchantment” no llegó a la altura de los anteriores trabajos de Matt y decepcionó. La serie quedó en la sombra de Los Simpsons con una historia que intenta hablar sobre la vida y la muerte, sobre el amor, la amistad y el sexo. Grotesco, simple y con carencia de novedades, “Disenchantment” resultó ser una serie para el “Desencanto”. Los comentarios negativos fueron mayoría, tanto así que está en duda su segunda temporada.
La serie está disponible en Netflix, por ahora, podes verla y sacar tus propias conclusiones.