Nuestro cinéfilo Javier (@c.ndreee) presenta 5 películas ideales para ver en diciembre
Se han hecho películas humanizando animales, electrodomésticos, juguetes, alimentos, monstruos y un sinfín de cosas. Si se hiciera una sobre los meses del año (ya todo es posible), el pobre diciembre estaría estereotipado al 99% en torno al concepto de la Navidad. Siendo amante de este periodo, os adelanto que no voy a orientar el artículo en torno a esta idea. No es que sea yo un revolucionario que se escapa de la norma (un poco sí). De hecho, el año pasado sí que lo hice, pero a mi manera. Traje un debate que siempre me encanta sacar a relucir en estas fechas (y que vuelvo a traer mencionándolo en este preciso instante): ¿Qué es una película navideña? Entre las 16 escogidas puse ‘Die Hard’ de Bruce Willis, así que imaginaros el artículo…
Está claro que adaptar todo al concepto navideño en estas fechas es lo inteligente para conseguir visitas, ventas etc.. y sino que se lo digan a la reina de la Navidad (con respeto de Gaspar y compañía). Mariah Carey, esa mujer de la que (sin contar Estados Unidos) solo hablamos durante la temporada navideña. Otro claro indicador de lo que tira en estas fechas es el Top10 de películas más consumidas de la última semana de noviembre en Netflix (5 de 10 son ya navideñas). A esto podríamos sumarle innumerables señales (marketinianas) más…
Juntando dos pensamientos que me definen, os voy a introducir el porqué de las elecciones de este mes. El primero es mi posicionamiento en contra ante cualquier radicalismo (en ningún ámbito). De ahí que no vaya erradicar toda película navideña del listado de diciembre. Simplemente no representarán el 100%. Como decimos en España, “ni tanto, ni tan calvo”. De hecho, la escogida como representante de la Navidad provoca que incumpla una norma no escrita del mundo periodístico: repetir una película que ya has incluido en una lista sobre el mismo tema (imaginaros lo que me apasiona). La verdad que bastantes normas tenemos ya en la sociedad como para encima, fijarnos nosotros alguna más.
El segundo pensamiento es que siempre se puede ir más allá. Hacer algo nuevo o cambiar lo preestablecido. Por mínimo que sea, tratar de no hacer lo que se hace siempre, da un valor añadido a tu persona incalculable. Tras el giro del año pasado, os traigo una bandeja de dulces con uno 100% navideño, otros ligados a sentimientos que nos invaden estos días y alguno que, aunque no case con la temporada, merece ser recordado.
Sin más dilación, para vosotros, LAS 5 DE DICIEMBRE
Las plataformas que aparecen en este listado son las correspondientes a Argentina y España. Para saber dónde verlas en vuestro territorio podéis revisarlo en Filmaffinity.
1 de diciembre – Ya está aquí la Navidad
LOS QUE SE QUEDAN de Alexander Payne (HBO Max, Arg) (Movistar +, España)

Comenzamos con el dulce 100% navideño y la culpable de que incumpla el reglamento del buen periodista. Vivimos una época en la que atribuir etiquetas a películas, incluso antes de que se estrenen, está a la orden del día (“Obra maestra”, “La película de la década”…), aunque lo realmente triste viene cuando esa afirmación no nace del sentimiento de quien lo escribe sino del pensamiento demoniaco que le incita a sumarse a la ola o querer generar tráfico. Esto sí que debería ser un pecado en la Biblia del periodista.
Cuando vi ‘Los que se quedan’ aquel frío día de invierno con mis padres en el cine, recuerdo salir diciendo: “esto YA es un clásico navideño”. En ese preciso instante pasé a formar parte de ese primer grupo que he comentado. Dos años después me reafirmo. Hay veces que sí que se puede sentir algo tan potente con una peli como para etiquetarla. El problema está cuando algo que debería ser excepcional se convierte en cotidiano.
Estamos ante una peli con una estructura de las de toda la vida. De las que decide trazar una sólida línea recta en lugar de pinturrajear laberintos. Sencilla, que no plana, pero a la vez compleja en emociones. Como la vida misma. Rezuma empatía, emoción y pureza en lo que cuenta. Transmite hogar (¿Se puede eso?). Irene Crespo de Cinemanía la describió con una frase que me encantó: “Busca más la sonrisa y la calidez que la lágrima”.
Una película que en cuanto pase el tiempo y el factor nostalgia juegue a su favor, entrará en el listado de clásicos de mucha más gente y por ende, se unirán a la corriente que inicié ese 3 de enero de 2024. Desde el año pasado sé que mi Navidad no es Navidad si no veo ‘Los que se quedan’ y ‘Klaus’ (esta os la regalo).
No quiero concluir el texto sin mencionar el altísimo nivel y química que desprende su trío protagonista. Con Paul Giamatti no descubrimos nada, Da’Vine Joy Randolph fue un bombazo valorado durante toda la carrera de premios, pero lo de Domininc Sessa no fue cosa menor. Infravaloradísima actuación opacada mediaticamente por los dos titanes que le acompañan. Para mí, el más complejo y mejor ejecutado.
Sinopsis – Paul Hunham, un profesor cascarrabias de un prestigioso colegio de Nueva Inglaterra, se ve obligado a permanecer en el campus durante las vacaciones de Navidad de 1970 para velar por un puñado de estudiantes que no tienen a dónde ir. Contra todo pronóstico, la convivencia le llevará a forjar un insólito vínculo con uno de ellos, Angus, un inteligente y problemático muchacho con sus propios traumas, y con Mary, la jefa de cocina de la escuela, que acaba de perder a un hijo en Vietnam.
10 de diciembre – Todos somos niños
¡ROMPE RALPH! de Rich Moore (Disney +)




El factor nostálgico que menciono en ‘Los que se quedan’ es un concepto muy interesante y complejo de integrar en un análisis fílmico. Difícil de medir. Puede ser ese valor añadido diferencial para la relevancia de una película. Una “obra maestra” del presente puede perdurar menos en el tiempo que esa “buena peli” actual que con el paso del tiempo consigue añadir la nostalgia a su receta.
Lo que hace tremendamente valioso dicho ingrediente es la casi imposibilidad de incluirlo intencionadamente a la creación de una película. Si hubiera una manera de lograrlo, sería siguiendo la estrategia “¡Rompe Ralph!”. Los de Disney demostraron inteligencia integrando directamente el ingrediente secreto como elemento principal. “¡Rompe Ralph!” desprende nostalgia a raudales. “¡Rompe Ralph!” es nostalgia.
La película es un continuo despliegue de juegos y referencias de la época más nostálgica para cada uno de nosotros: la infancia. Todos habríamos pagado (y pagaríamos) por vivir en el mundo de Ralph. Estamos ante un trampantojo. Una película de estética infantil con corazón de adulto. Al plato le acompaña una salsa exquisita formada por personajes me-mo-ra-bles, frescura de ideas, emotividad y entretenimiento a raudales. Una película que parece más Pixar que Disney. El mejor elogio posible en el cine de animación.
Sinopsis – Durante décadas, Ralph ha vivido a la sombra de Repara-Félix Jr., el chico bueno de su videojuego. Cansado de ser el malo de la historia, Ralph decide tomar el asunto por sus propias y gigantes manos, y se lanza en un viaje a través de los distintos mundos y generaciones de videojuegos para demostrarle al mundo que él también puede ser un héroe.
18 de diciembre – 14 años del fin de la guerra de Irak
WARFARE: TIEMPOS DE GUERRA de Alex Garland y Ray Mendoz (Prime Video)




Como me gusta la etapa actual de Alex Garland. En ‘Civil War’ me apasionó descubrir una película “bélica” en la que el contexto histórico era irrelevante. Una road movie en un escenario de guerra civil total en la que desconoces durante todo el metraje el motivo de ésta o quiénes son los buenos y malos. Los tiros no iban por ahí. La historia era otra.
En ‘Warfare’ se mantiene en el género y, aunque presenta una operación real de los Navy SEALs durante la guerra de Irak, de nuevo, obvia el contexto global y decide centrar la mirada en una historia concreta. No busca crear un documento historiográfico visual, sino exprimir las sensaciones que vive un pelotón y transmitirlas a través de la pantalla. Un relato hiperrealista (prácticamente en tiempo real) en el que predomina la calma versus el éxtasis (ficticio) continuado que suele haber en este tipo de cintas. No hay actos de locura. La espera y el manejo de los tiempos son clave durante la guerra. La épica de postín no tiene cabida en ‘Warfare’. La tensión y el temor son atributos más reales que la heroicidad a la que nos tienen acostumbrados.
Alex Garland ha demostrado inteligencia en numerosas ocasiones mediante sus decisiones. Aquí se corona al co-dirigir y co-guionizar la película con Ray Mendoza, ex marine que vivió en sus propias carnes la historia que narran. Decisión fundamental para una película que prioriza contar el CÓMO frente a todo.
Mención honorífica también a Kharmel Cochrane, directora de casting. El reparto, formado por rostros jóvenes sin notable experiencia en la gran pantalla, pero con interesantes incursiones en la tv, son (mayoritariamente) diamantes en bruto. Dejo por escrito los nombres de Finn Bennett, Kit Connor, Joseph Quinn, Will Poulter o Michael Gandolfini. Futuras posibles estrellas de Hollywood,
Sinopsis – Basada en las experiencias reales del ex marine Ray Mendoza (codirector y coguionista de la película) durante la guerra de Irak. Introduce al espectador en la experiencia de un pelotón de Navy SEALs estadounidenses. Concretamente en una misión de vigilancia que se tuerce en territorio insurgente. Una historia visceral y a pie de campo sobre la guerra moderna y la hermandad, contada como nunca antes: en tiempo real y basada en los recuerdos de quienes la vivieron.
24 de diciembre – Nochebuena – La familia
AFTERSUN de Charlotte Wells (Netflix, Arg) (Movistar +, Esp)




Las personas que nos rodean. Los momentos que éstas generan. Eso, es la vida. Muchas veces la adornamos o intoxicamos con otros complementos, cuando si disfrutamos de esos dos factores (algo que continuamente olvidamos), todo sale rodado. La Navidad tiene mucho de familia. Personas fundamentales generadoras de momentos vitales. Sin embargo, el sentido de la vida no siempre es tan fácil y bonito. De ahí que la temporada navideña pueda ser sinónimo de felicidad, malestar o anhelo, dependiendo de tus vivencias y sentimientos. Mi caso es el primero.
Toda esta retahíla de sentimentalismos plasmados en el primer párrafo son consecuencia de tener que introducir ‘Aftersun’. Nunca una película cogió con tanto tino mi mayor miedo, lo estrujó. aplastó y pisó: “Javier ; ¿Eres consciente de que el tiempo vuela y la familia en la que te sujetas, un día no estará?”. Siendo el pequeño de la familia, cuando ese pensamiento te invade, te toca. Saber que mi película seguirá, aunque ellos no estén, es algo tremendamente doloroso. Lo curioso es que a la vez, el pensamiento reconforta. Me hace vivir el momento. Disfrutarlo. Y ahí está la clave. Papá, mamá, Alberto, Alejandro, os quiero.
‘Aftersun’ posee todos estos sentimientos y fases. Cala muy en el fondo de aquellos cuyos vínculos paternales representen uno de sus pilares. Melancólica, real y por momentos onírica es un arrebato de verdad en la relación padre-hija. ‘Aftersun’ va de la vida. De la fuerza del amor, de valorar lo vivido, del poder del tiempo y del valor de los recuerdos. Una película que te conquistará si conecta contigo, pero que te dejará frío si no empatizas con ella. No para aquellos que busquen tramas con algo a resolver, protagonista y antagonista o un final de conclusión clara. Fue la consolidación de Paul Mescal tras ‘Normal People’. Su actuación y la de Francesca Corio traspasan la pantalla (toma topicazo). Un largometraje del que mejor no desvelar más.
Matrícula de honor para Charlotte Wells. Guionista y directora. Contadas óperas primas tienen una personalidad tan arrolladora, una identidad tan marcada y sobre todo, consiguen calar tan hondo en el espectador. Desde que salió en 2022, ‘Aftersun’ es una de las películas con mayor presencia en todos los tops de profesionales y letterboxianos.
Sinopsis – Sophie reflexiona sobre la alegría compartida y la melancolía privada de unas vacaciones que hizo con su padre 20 años atrás. Los recuerdos reales e imaginarios llenan los espacios entre las imágenes mientras intenta reconciliar al padre que conoció.
25 de diciembre – Abriendo regalos – Amor de hermanos
GOOD TIME de los hermanos Safdie




La relación fraternal es muy especial. A la parte familiar puedes añadirle una amistosa que la convierten en una fusión única. Con tus padres compartes un amor incondicional familiar. Con tus colegas, una fuerte amistad. Siento que la relación con un hermano puede adquirir ambas facetas en su máximo esplendor y generar una conexión imposible de replicar con el resto de personas. A estas dos facetas, los hermanos Safdie le suman la laboral (esperemos que ninguna más). De ahí las maravillas que crean.
Cuando escribo esto, todavía no se ha estrenado ‘Marty Supreme’, la primera película de Joshua sin su hermano Ben, la cual promete ser el bombazo de 2026. Ambos, en 2017 estrenaron ‘Good Time’ protagonizada por el gran Robert Pattinson (¿De verdad todavía hay gente que no se ha dado cuenta dell actorazo ante el que estamos?). Es una de esas películas con aspecto sucio y ritmo frenético que me encantan. Ordenada en su desorden, breve y concisa. Una peli de noche y butaca, no de siesta y sofá. Con el amor fraternal como leitmotiv encubierto de la historia, los hermanos Safdie disfrutan (y yo con ellos) buscando localizaciones visuales llamativas y jugando con la continua variedad de planos.
Una película de nicho que no debería serlo.
Sinopsis –Después de que el robo chapucero de un banco acabe con su hermano pequeño en prisión, Constantine Nikas (Robert Pattinson) se embarca en una odisea a través del mundo subterráneo de la ciudad en un intento, tan desesperado como peligroso, por conseguir el dinero de la fianza para poder sacar a su hermano de la cárcel.
¡Esto es todo para diciembre! Espero que paséis unas Navidades muy chulas. No dudéis en escribirme por Instagram para comentar (@c.ndreee). Tampoco dudéis en saliros de la norma. Siempre gracias por llegar hasta aquí 🙂
Larga vida al cine <3











































