Sala Baker recordó junto a Federico Carestia el tenso momento con Viggo Mortensen durante una escena con espadas reales.
El Señor de los Anillos ha sido una de las trilogías que más caló hondo en el público. Viggo Mortensen, quien se puso en la piel de Aragorn, fue uno de los personajes más queridos. Pero, en el rodaje de una de las cintas, tuvo un inconveniente que casi le cuesta la vida a uno de los presentes.
Sala Baker, quién hizo el doble de Sauron, dialogó con Federico Carestia de Mira que encontré y le comentó el momento vivido. El neozelandés no quedó en el papel del villano original por su tamaño corporal, y pasó a ser el doble de riesgo. Además, también se puso en la piel de varios orcos.
¿Qué sucedió en ese momento?
Como bien comenta el periodista, en la película se utilizaron espadas muy reales en el set, y otras más livianas para rodar las escenas en las que había acción con las mismas. Fue eso lo que permitió que Baker no haya sido gravemente herido.
“Teníamos una escena en los abismos de Helm, donde Viggo tenía una espada de aluminio, no era real, era más liviana”, comienza diciendo el actor que también participó en producciones como Piratas del Caribe, Sherlock Holmes, The Expendables y The book of Eli. Y al dudar sobre si contar la historia o no, prosiguió: “No fue su culpa. Estábamos entrenando, con un nuevo caballo negro, que sería su caballo, y no había estado nunca en el set, ni había estado cerca de espadas que se blandían sobre su cabeza ni nos había visto con las máscaras de los orcos. Así que nos las quitamos para que nos viera que éramos humanos, pero en el ensayo de la pelea Viggo iba a golpearme en el hombro, y el caballo se levantó en dos patas y por eso Viggo me terminó golpeando en la cabeza con la espada. Me abrió la cabeza, me pusieron nueve ganchos en la cabeza, si era una espada real, estaría muerto”.
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