La actriz, Daisy Ridley encarnó a Rey en la última trilogía de Star Wars. El fandom fue muy crítica con ella y por eso decidió alejarse de las redes.
Cuando se estrenó la primera producción de la última trilogía de Star Wars, Star Wars: Episodio VII – El despertar de la Fuerza, Daisy Ridley tenía tan solo 22 años. La británica se puso en la piel de Rey, la que posteriormente sería denominada la “última jedi”. Tras la primera película llegaron: Star Wars: Episodio VIII – Los últimos Jedi y Star Wars: Episodio IX – El ascenso de Skywalker; así como también, todos los comentarios ofensivos de los fans hacia la actriz.
La palabra de Daisy
La actriz tuvo una entrevista con la revista Rolling Stone, y contó su situación. Tras la primera producción, Daisy Ridley, no solo fue atosigada a través de las redes sociales, sino también, en público: “Lo gracioso es que, como no leía cosas ni estuve en redes sociales durante un tiempo, la gente en la calle era muy abierta con sus opiniones y yo estaba en plan, estoy bien, no necesito escuchar eso. Bien, como persona, independientemente de si me ha gustado una película o no, jamás me acercaría a alguien y le diría, ‘He odiado tu película’. Porque soy un ser humano. Probablemente era más una cuestión de género de lo que yo pensaba”, expresó.
Durante la entrevista, Ridley también aludió a los ataques centrados en la raza, el físico o el género de los intérpretes que dieron vida a personajes como Rose o, en el caso de la serie de Obi-Wan Kenobi, Reva (Moses Ingram): “Si. Afortunadamente, no me arrepiento de nada. Creo que hay demasiada bilis ahí fuera que no necesito leer. Lo sentí por Moses Ingram, y siento que, en comparación, fue mucho peor para otras personas. No creo que sólo sea fandom. Todos creen que tienen la necesidad de decir todo lo que sienten, y no sé si lo hace todo el mundo. Es una de esas cosas sobre las que no tiene sentido discutir, porque la gente piensa lo que piensa“, señaló.
Y cerró: “Así que, en lo que a mí respecta, voy a continuar trabajando en cosas que crea que hablan a la gente, hombres y mujeres, y si a la gente no le gustan, pues no le gustan”.
Daisy regresó el año pasado a Instagram, y recibió más cariño que hate. Cabe recordar, que hace varias semanas, Tom Holland decidió cerrar también sus redes sociales por su salud mental. La presión de la industria, y de los fans, sobre las actrices y actores, es cada vez mayor; y desde nuestro lado, deberíamos frenar un poco con el frenesí hacía ellas/os.