La producción que ya se encuentra en cines, The Black Phone, se inspiró en una historia real. Conócela a continuación.
La película The Black Phone está causando furor entre los fans del terror. Dirigida por Scott Derrickson tiene como protagonista a Ethan Hawke, (ambos participaron en Sinister); y la producción está inspirada en una historia real, aunque se modificaron algunas situaciones.
“En una ciudad de Colorado, en los años 70, un enmascarado secuestra a Finney Shaw, un chico tímido e inteligente de 13 años, y le encierra en un sótano insonorizado donde de nada sirven sus gritos. Cuando un teléfono roto y sin conexión empieza a sonar, Finney descubre que a través de él puede oír las voces de las anteriores víctimas, las cuales están decididas a impedir que Finney acabe igual que ellas”, marca la sinopsis de la película.
La historia real detrás de la producción de terror
El caso se inspiró en el secuestro de Steven Stayner por parte de Kenneth Parnell y un cómplice. En pleno otoño estadounidense, Steven regresaba del colegio con tan solo 7 años y fue secuestrado por Parnell; quien lo llevó a su domicilio y abusó de él. Con el paso del tiempo, el Kenneth Parnell convenció a Steven de que tenía su custodia. El pequeño fue obligado a llamarse Denis Parnell, y vivió amenazado todos esos días.
Kenneth ya tenía antecedentes: había agredido sexualmente a un menor de 9 años. Tras un mes, inscribió a Steven, ahora Denis, a un colegio del barrio. El 14 de febrero de 1980 Parnell lo hizo de nuevo: secuestró a Timothy White, un niño de solo 5 años. Aunque Steven ya entendía la situación, y varias veces logró frustrarle otros secuestros.
Gracias a Stayner, White no sufrió abuso. Y ambos, el 1 de marzo de 1980, fueron a una estación de policía, donde contó toda la verdad. Tras siete años de sufrimiento, Steven logró enjuiciar a Parnell, aunque el jurado solo dictaminó veinte meses de prisión para el mencionado.
La sentencia más amplia la tuvo por el caso White, ya que fue condenado a más de seis años de prisión. Aunque fue liberado tras el quinto año de reclusión por buena conducta. Parnell falleció en el año 2008.
El director también contó su vivencia
“Crecí en una zona del norte de Denver que era bastante violenta, mucho acoso escolar, muchas peleas, muchos niños que sangraban todo el tiempo. También fue justo después de que Ted Bundy pasara por Colorado, matando gente. Y los asesinatos de Manson acababan de ocurrir”, dijo Scott Derrickson al portal News sobre The Black Phone.
“Cuando tenía ocho años, mi amigo de al lado llamó a la puerta de mi casa y dijo: ‘Alguien ha matado a mi madre’. La madre de mi amigo de al lado fue asesinada. Y había mucha violencia doméstica, incluso en mi propia casa y en la de muchos de los niños que conocía”.
“Los padres castigaban a los niños de forma mucho más agresiva, por lo que era un lugar muy violento y aterrador para crecer en muchos sentidos. Y traté de trasladar ese ambiente de forma realista a la película”, concluyó Derrickson.