Cinéfilos habló con Nicolás Francella, Gabriel “el Puma” Goity, Emilia Attias y Paula Reca por el estreno de “En la mira”.
En la mira es el nuevo film argentino de thriller, dirigido por Ricardo Hornos y Carlos Gil. Está protagonizado por Nicolás Francella, Gabriel Goity, Emilia Attias y Paula Reca.
La sinopsis de la película dice: “Axel es un empleado de un call center que está acostumbrado a las quejas de sus clientes y a un jefe insoportable. Axel tiene un talento natural para lidiar con la gente y sus problemas. Pero un día todo cambia, cuando recibe el llamado de Figueroa Mont un cliente frustrado que desea darse de baja. Harto de la burocracia de las empresas, Figueroa le advierte a Axel que lo está observando a través de una mira telescópica adosada a un rifle de alta precisión y que si no le soluciona el problema le va a volar la cabeza.”.
Les dejamos el tráiler de En la mira:
Entrevista a Nicolás Francella
Rocío Panizo: ¿Cómo fueron los tiempos de grabación y cómo te llegó este proyecto?
Nicolás Francella: Para septiembre, terminamos la primera parte de la película. Filmamos 4 semanas en Montevideo, Uruguay. En Buenos Aires, tuvimos menos días y la terminamos. El proyecto me llegó por parte de la productora ZetaFilms, con los productores de El Robo del Siglo, hace un tiempo. Me acuerdo de cuando estaban en rodaje, de ir a visitarlos y había un guión dando vueltas que me lo exteriorizaron y estaban con ganas de mostrármelo para que lo lea. Empezamos a tener conversaciones desde aquel momento. Es una película de Ricardo Hornos y Carlos Gil. Ricardo es una persona q conozco hace mucho tiempo, fue la primera persona con la que empecé a conversar y a hablar del guión.
RP: ¿Qué fue lo que más motivó a aceptar interpretar este personaje?
NF: La película es un thriller psicológico, yo soy bastante fanático de este tipo de historias donde te mantienen sentado y ansioso de lo que estás viviendo, de la historia en la que estás participando. Es una película en la que todo se desenlaza a partir de una llamada que recibe Axel Briganti, el nombre del personaje, es un chico de 27 años que vive el día a día, que no se hacía problema por nada, es un tipo simpático, seductor, tiene una novia que, te vas a dar cuenta con el tiempo, que no la merece y trabaja en un call center. Está acostumbrando al mundo de un call center y a su dinámica, a sus compañeros/as y a manejar todo “de taco”, se siente superior todo el tiempo y se siente capacitado para hacerlo todo. Hasta que, en un momento, recibe un llamado que lo deja un poco fuera de sí, descolocado, sin saber cómo responder. Ahí, arranca el desenlace. La forma en la que se va dando y cómo resolvimos filmarlo y actuarlo con lo que vive y escucha el personaje, inevitablemte, va a hacer que el espectador lo acompañe a lo largo de toda la película.
RP: ¿Cómo te preparaste actoralmente para interpretar a Alex, teniendo en cuenta que todo el eje central de la historia pasa por este llamado, por es voz externa?
NF: Bueno, eso es algo diferente, principalmente, porque estás actuando con una voz grabada y estás escuchando y , al mismo tiempo, lo vamos trabajando. Eso era un poco el desafío de sentirse uno cómodo que, por suerte, lo pudimos hacer y el desafío de estar memorizando todo. El personaje de la otra persona lo interpreta Gabriel Goity y tuve la posibilidad de juntarme con él y ver cómo venía preparando cada grabación. A lo largo del rodaje, estaba con auriculares y, como el personaje está en muchos momentos escuchando mucho su voz, escuchando la situación, estuve tratando de incorporar todo eso que le viene pasando [al personaje] desde que me siento en esa silla. Fue un desafío el hecho de estar, en muchos momentos, escuchando esa voz, y tanto de ver qué está pasando con esa amenaza y por dónde estoy pasando y todo lo que me va generando. La película vuela e inevitablemente, compras todo lo que le va pasando al personaje hasta ver cómo resuelve esa locura que se le presentó.
RP: Y. también, tiene todo su conflicto personal con la novia y su amante.
NF: Si, por eso creo que el espectador lo conoce de pé a pá a este personaje. Entonces, desde que lo conocés que está de novio y te das cuenta que es una novia que claramente no merece; lo que hace dentro de su mundo laboral, las actitudes que tiene, el hecho de demostrar que quiere a cada uno de sus compañeros y hace todo lo posible para que no le pase nada; todo eso lo vas a ir encontrando en toda la película, por lo que pasa, lo terminás viendo de una punta a otra.
RP: ¿Qué situaciones de la vida cotidiana te podrían llevar a actuar de una manera parecida a la que actúa el personaje del Puma Goity?
NF: No, yo creo que Nicolas nunca actuaría de esa forma. Es una forma muy extrema y no me identifico en lo más mínimo. Sí te digo cosas que me molesten en la vida cotidiana, como una mentira o desde una situación simple y tonta como una impuntualidad. Pero no tiene punto de comparación [con el personaje de Goity]. La mentira me molesta muchísimo en la vida, me frustra pero nada que actúe de esa forma.
RP: ¿Qué características de tu personaje tenés vos y qué personajes de tu personaje es todo lo contrario a lo que sos como persona?
NF: Antes de que le pase todo lo que le pasa [a su personaje], siempre tiene un estado de ánimo bien arriba. Yo me considero una persona que, generalmente, tengo un buen estado de ánimo. El tipo es una persona simpática, yo me considero una persona simpática. Siempre trato de andar con una sonrisa. Yo creo que son dos puntos en los que siempre lo veo muy cercano a mi, cuando estoy sonriendo o cuando trato con cariño a una novia; soy cariñoso. De ese lado me identifico rapidísimo. Después, hay un montón de puntos en donde no me identifico y es la antítesis a lo que yo soy: un tipo que va descubriendo actitudes feas en una relación, una persona que es bastante ágil en algunas situaciones en las que yo no lo soy, tiene actitudes de “mal” tipo donde no me identifico. Por eso digo que hay un momento en el que podés llegar a odiar a este tipo y ahí no me identifico en lo más mínimo. No me identifico trabajando en un call center y poder lidiar con mucha queja y hay que aprender a estar en ese mundo y tendría que tener una experiencia para poder manejarlo día a día; soy una persona que no puede vivir en piloto automático y este personaje vive muchas situaciones así. A mí me costaría ser eso. Si yo trabajo en mi trabajo en piloto automático y no me preparo y no tomo cada trabajo como una oportunidad y no la valoro o no la trabajo minuciosamente, no podría trabajar. Cuando me encuentro trabajando o bajando la guardia, es el peor momento de mi laburo, es el peor Nicolás, es el peor momento mío: cuando arranco a sentirme tan cómodo y es el peor momento que puedo elegir. Ahí es donde tengo que encontrar la vuelta y volver a encontrar. En cambio, este personaje se encuentra cómodo. Yo, ese ocio y esa tranquilidad no la puedo tratar.
Entrevista a Gabriel Goity
RP: ¿Cómo te llegó este proyecto?
Gabriel Goity: Me llegó por intermedio del director, Ricardo Hornos, con quien tengo una relación personal. Somos amigos. Él también se dedica a hacer producciones de teatro, asique el hecho de haber participado con él en otro proyecto en el teatro deriva en una relación personal. Sabía que estaba escribiendo su guión y, cuando me lo dio a leer, me gustó mucho. Me sorprendió con la convocatoria, me sentí muy alagado en muchos sentidos y poder estar en su primera película y darle cuerpo y voz a este personaje fue satisfactorio.
RP: ¿Qué fue lo que más te motivó de este personaje para aceptarlo?
GG: Y… es difícil porque es un personaje que es un protagónico que no pone el cuerpo. Y a los actores nos gusta poner el cuerpo, por lo menos a mí: me encanta poner el cuerpo y demás y me pareció un desafío muy grande. Hacer de este psicópata que va envolviendo a los personajes me pareció un gran desafío de mi parte; sobre todo por la formación que tengo: trabajo mucho con la voz, con el decir. Sea como fuera yo iba a estar [en la película] pero me encontré con una complejidad no habitual que es el hecho de someter a los personajes desde la voz e hice una conjunción muy atractiva, además de lo que tiene que ver con lo personal.
RP: Como actor, ¿cómo preparaste tu personaje que solo aparece a través de la voz? Justo vos que sos un actor que siempre se destaca por lo corporal, lo facial. ¿Cómo fue esa transición?
GG: Difícil. Pero, te lleva a concentrarte desde otro lado, a trabajar mucho con el director, a la imaginación. Es un trabajo que es mucho más difícil. Ahí es cuando es fundamental Yo en el teatro, juego más libre pero en el cine es una actuación más pasiva y dependes absolutamente del director y de su pensamiento y lo que él quiere. Me someto absolutamente al director y la confianza con él. Fueron horas, horas encerrados en el estudio para lograr lo que él quería. Fue arduo pero, ojalá que les guste. Yo, por lo menos, salí muy satisfecho, me gustó mucho. Desde chico siempre me gustaba participar en radio-teatro; asique soy un admirador de la voz y el relato y esto era una gran oportunidad.
RP: Entonces, ¿todo tu trabajo se dio siempre desde los estudios donde grabaste la voz? ¿En ningún momento te entontraste con los otros peronajes y trabajaron algo más corporal, cara a cara?
GG: No, no, no. Salvo algunos diálogos, cuando vino Nico Francella. Pero, también estábamos en un atril en el estudio. Había que crear todo el clima. Fue difícil, pero conectamos muy bien y el libro es muy bueno. Cuando el libro es bueno, no es confuso, hay claridad en los personajes y en los conflictos e intenciones, funciona bien.
RP: ¿Qué situaciones de tu vida cotidiana te pueden llevar a vos al límite de tu personaje
GG: Y… vivimos en una sociedad muy dura. Es una selva. La incertidumbre es constante. Uno sale a la calle acá y no sabe qué va a pasar y con todo lo que tiene que ver la informalidad en todas las cuestiones. Hay que comerse un buda cada mañana para no reaccionar de formas que no convienen. Si es por eso, yo lo vivo todo el tiempo. Vivo constantemente en la calle y conectado con la gente, no vivo aislado. En ese tipo de situaciones, uno está sometido a maltratos del sistema y de todo. Por ejemplo, querés hablar con la empresa porque se te cortó el teléfono y tener que hablar ya es someterse a un viaje de ciencia- ficción: te pasan 17 números para marcar y así. Un nivel de locura muy alto.
RP: Por último, ¿cómo fue la experiencia de trabajar en pandemia después de más de un año de industria pausada?
GG: Con mucha alegría y euforia. Muchas ganas. Yo empecé con el teatro, nuevamente; que fue muy difícil porque ahí necesitás a la gente si o si. Al principio, venía muy poquita gente y después fue subiendo. Los proyectos que aparecieron durante la pandemia dio, también, con el florecimiento de las plataformas. Y hay un movimiento muy interesante para todos los que nos dedicamos a esto porque tenemos muy buena materia prima en la Argentina: tenemos excelentes autores, directores, camarógrafos, técnicos, actrices y actores. Ojalá que volvamos a posicionarnos y recuperar el lugar que tuvimos hace años con las ficciones del mundo.
Entrevista a Emilia Attias y Paula Reca
Rocío Panizo: ¿Cómo les llegó este proyecto?
Paula Reca: A mí me llegó hace bastante. Fui justo uno o dos meses antes de que arranque toda la pandemia. Apareció Ricardo Hornos que es uno de los directores de la película para que lea el guión. Le interesaba que interprete a Martina que es el personaje que me tocó. A partir de que había hecho una obra de teatro en 2019 que él me vino a ver y le pareció que yo podía ser Martina y ahí comenzó.
Emilia Attias: A mí me llegó mas o menos de la misma manera. Ricardo que lleva el proyecto fue quien me convocó hace casi dos años. Hablamos muchísimos, tuvimos un ida-y-vuelta muy intenso por el personaje, pese de que fue hace dos años. Por eso, cuando llegamos a filmarla, teníamos todo bastante claro y tuvimos la oportunidad de tener videollamadas de trabajo y construir bastante a la distancia. Fue un trabajo distinto y muy adaptado a los tiempos de pandemia y, también, fue de la mano de uno de los dire.
RP: ¿Qué las motivó a aceptar a interpretar a estas mujeres?
PR: A mí me gustó mucho esto que cuenta Emi de las llamadas telefónicas con Ricardo que estaba en Nueva York. Se dio una dinámica de un diálogo que me interesó mucho para participar en su película. Me gustó mucho el intercambio, su mirada sobre varios proyectos que tiene y me interesó el vínculo con él. Me gustó mucho la idea de trabajar con Nico y con Emilia que ya los conocía y sabía que la íbamos a pasar increíble en Uruguay. Eso también suma, cuando te dicen que se va a filmar en otro país. Más allá de eso, a mí me gustaron las escenas que a me tocaron con Nico, me parecían interesante lo que tenían que contar, que tenían un principio, un medio y un fin; que daban una vuelta y había un desarrollo y una transformación.
EA: A mí, también, muy nutritivo el intercambio que tuve con Ricardo por mi rol. Gimena es una mujer que tenía un desafío grande para mí porque goza de un poder muy fuerte. Me parecía muy interesante retratar a una mujer con ese poder sobre ella misma, sobre sus deseos. La manera en que lo podíamos encarar tenía aristas a nivel interpretativo: podía ser la seducción masculina o la seducción o los dos, la frialdad. Hubo un montón de ideas y pruebas sbre cómo encararlo. Y un poco con la mirada puesta sobre la mujer, hoy, construimos esto de una mujer con mucho poder personal. Eso, para mí, fue re interesante.
RP: ¿Cómo son sus personajes, cómo los describirían y qué relación tienen con el personaje de Nico?
PR: La película es todo en un día y cómo al protagonista -que es Nico- se le desarma todas las áreas de su vida. Yo vengo a ser su novia, con la que se quiere casar, con la que viven juntos. Eso, en un segundo, se destroza todo. Vengo a hacer esa parte de la historia de todo lo que le está pasando a él con el amor.
EA: En mi caso, lo que genero en el personaje de Nico es la razón por la cual se le desarma un poco su vida. La historia central es la de él y es justamente cómo se le desarma toda su vida. Yo vengo a ser un juego que vengo a hacer con mi pareja -que es el Puma Goity- y, de una manera que no voy a delatar, tenemos como “presas” para reavivar la pareja entre nosotros. No quiero spoilear. Yo me obsesiono con el personaje de él a nivel sexual y empiezo a manejarlo con mucha impunidad, lo pongo bastante en riego. Eso me gusta y a él también; pero se le desarma la vida.
En la mira ya se encuentra en los cines de Argentina.